2018-04-19

2018-04-19

Cuando nuestro Padre (Alberione) habla de la confianza en la divina Providencia, ya no sabe cómo acabar el sermón; lo dice él mismo: las palabras le brotan inflamadas, las frases se las dicta el corazón, sin un nexo entre las partes, pero persuasivas (Diario, 7.01.1919).