Jesús en el rosario: Jesús padece el sufrimiento. María en el rosario: la vida de María fue un prolongado martirio. Fruto: la voluntad de Dios.
p. 97Intención: por las personas tentadas. Palabras: Jesús oró por tercera vez: «Padre, no lo que yo quiero, sino lo que tú quieres». Eucaristía: la reparación. Amor puro: lámparas vivientes.
2. Jesús, atado a la columna, es cruelmente azotado para reparar las inmoralidades de los hombres. Pidamos la virtud de la castidad (Mt 27,26; Mc 15,15; Jn 19,1). Puntos de meditaciónJesús en el rosario: Jesús es el reparador. María en el rosario: la virginidad de María. Fruto: pureza de los sentidos. Intención: por los obstinados en el mal. Palabras: «Después de azotarlo, lo entregó para que lo crucificaran». Eucaristía: las profanaciones. Amor puro: perdón de las ofensas.
3. Jesús es coronado de espinas y despreciado por culpa de nuestros pensamientos y sentimientos malos. Pidamos la pureza de la mente y del corazón (Mt 27,29; Mc 15,17). Puntos de meditaciónJesús en el rosario: Jesucristo es Rey. María en el rosario: la santidad de María.
p. 98Fruto: pureza interior. Intención: por los gobernantes. Palabras: «Salve, Rey de los judíos». Eucaristía: los adversarios de la eucaristía. Amor puro: amor en los pensamientos y sentimientos.
4. Jesús, condenado a muerte, lleva la pesada cruz al Calvario. Pidamos la fuerza necesaria para soportar los sufrimientos (Lc 23,26-33; Jn 19,16-17). Puntos de meditaciónJesús en el rosario: Jesús es el mediador. María en el rosario: María corredentora. Fruto: completar la pasión de Cristo. Intención: por los que sufren. Palabras: «No lloréis por mí, llorad por vosotras». Eucaristía: el divino Cirineo. Amor puro: el amor aguanta sin límites.
5. Jesús es crucificado, agoniza durante tres horas y muere para salvarnos. Pidamos la gracia de amar la eucaristía, que actualiza el sacrificio del Calvario (Mt 27,33-56; Mc 15,23-41; Lc 23,33-49; Jn 19,18-37). Puntos de meditaciónJesús en el rosario: Jesús se entrega por todos los hombres.
p. 99María en el rosario: María es nuestra madre. Fruto: el amor de Dios. Intención: por los agonizantes. Palabras: «Padre, perdónalos…». Eucaristía: la celebración eucarística. Amor puro: la entrega sin reservas.
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